Ciudades inteligentes, impactos reales y desafíos futuros.
Anteriormente hemos explorado el potencial que tienen las estrategias de Smart Cities y su impacto en las comunidades. En esta ocasión haremos una evaluación crítica acerca de la implementación real para analizar los impactos positivos, las promesas incumplidas y los desafíos que enfrentamos para el futuro de las ciudades inteligentes.
Metodología de evaluación
Nos hemos basado en los indicadores claves de la eficiencia del transporte, calidad de vida, ambiental, seguridad ciudadana y accesibilidad a los servicios digitales. Los datos utilizados son estudios comparativos realizados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), CEPAL y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT)
Impacto medible en la calidad de vida
Eficiencia energética.
Un 20% de ahorro energético ha permitido el uso de energías renovables en los hogares de Amsterdam (Holanda).
Reducción de los tiempos de viaje.
La ciudad estado de Singapur logró una reducción en los tiempos de desplazamientos en un 20% gracias al uso de herramientas tecnológicas para la gestión del tráfico.
Acceso a servicios digitales públicos.
Un ejemplo mundial en la digitalización de un país es Estonia que ha digitalizado el 99% de los servicios públicos ahorrando ostensiblemente los tiempos de trabajo, por ejemplo de sus ciudadanos.
Efectos negativos, la otra cara de la moneda.
Quayside, fue un proyecto de smart city en la ciudad de Toronto (Canadá) y liderado por Sidewalk Labs de la empresa matriz de Google, Alphabet. No funcionó principalmente por desajustes culturales entre los gestores del proyecto que nació de la idea de uno de los dueños de Google, Larry Page y un ex-alcalde de Nueva York quienes le imprimieron una energía agresiva al proyecto lo que derivó en que entre los representantes de la comuna de Toronto y los gestores tuvieran serias desavenencias lo que llevó a su cancelación el año 2020.
En China, “la policía de Xinjiang está utilizando información recopilada de manera ilegal sobre el comportamiento perfectamente legal de las personas, y la está utilizando en su contra” lo que genera claras controversias acerca de las libertades civiles y la privacidad de los datos administrados, en este caso por el Estado como lo indica Human Rights Watch (HRW).
Uno de los desafíos planteados por el Fondo Económico Mundial (WEF) es la gran brecha de conocimiento tecnológico en los estamentos políticos lo que limita la aplicación de estrategias efectivas. Otro efecto negativo es que la idea de transformar una ciudad en inteligente sea solo una maniobra de marketing para intentar posicionar una marca.
Estos son algunos de los efectos negativos que puede provocar la idea de crear o gestionar las smart cities, por lo mismo nos adelantamos en plantear los desafíos críticos para el futuro y que creemos son:
- Garantizar que las tecnologías inteligentes beneficien a toda la población para evitar la exclusión social evitando la brecha tecnológica.
- La obvia necesidad de un financiamiento a largo plazo para darle sostenibilidad financiera a proyectos que van más allá de los períodos políticos.
- El envejecimiento de la población y los impactos de la crisis climática deben ser considerados en los programas con estrategias flexibles y que se vayan adaptando en el tiempo a los acelerados cambios en estas dos materias ineludibles.
- Sin duda la innovación debe estar en equilibrio con la preservación cultural para mantener la identidad local ante la avalancha que significa la transformación digital.
Sin duda estamos ante una revolución cuyo principal desafío está en implementar tecnologías como la inteligencia artificial o blockchain de manera ética y centrada en los ciudadanos. Por lo mismo y para maximizar un impacto positivo en las comunidades recomendamos:
- Priorizar la participación ciudadana y la inclusión digital.
- En materia de protección de datos es crítico el desarrollo de marcos regulatorios robustos.
- La capacitación y educación tecnológica universal es estratégica.
- Fomento de la colaboración público-privada sobre la base de la transparencia y factores éticos.
- Implementar proyectos que permitan la escalabilidad y la adaptabilidad.
Una visión de largo plazo que incluye, además de la tecnología en la construcción de las ciudades inteligentes debe tener como centro del accionar una gobernanza inclusiva que busque el beneficio y bienestar de todos los habitantes de las comunidades.